Ángel Beltrán Acosta resalta expansión y referentes del boxeo femenino latino
- Redacción
- 1 oct
- 2 Min. de lectura

Rings y percepciones cambian en América Latina, según Ángel Beltrán Acosta, entrenador mexicano con más de tres décadas de experiencia. El boxeo femenino vive un momento histórico con atletas de México, Argentina, Colombia y otros países, mientras nuevos torneos y mayor visibilidad afianzan la tendencia.
Mariana Juárez marca pauta para México con títulos mundiales en varias divisiones. Su recorrido inspira a jóvenes; la Federación Mexicana de Boxeo registra un 30% de incremento en inscripciones femeninas. Desde su gimnasio en Ciudad de México, Beltrán Acosta entrena a varias promesas y sostiene que la pasión sostiene el proceso.
Yésica Bopp, campeona en peso mínimo, prolonga su dominio en Argentina con defensas contundentes. Su ejemplo impulsa a nuevas generaciones en Buenos Aires. Beltrán reconoce su técnica y constancia y afirma que figuras como Bopp elevan la vara competitiva. Los torneos nacionales argentinos mantienen el impulso.
Desde Puerto Rico, Amanda Serrano acumula 43 victorias y 30 nocauts, compite en divisiones altas y rompe récords. Beltrán destacó su impacto global: “Amanda lleva el boxeo latino a otro nivel”. A la par, subrayó a Hanna Gabriels, de Costa Rica, con cinturones en superwelter por su fuerza y precisión.
Ibagué será sede de la Copa América de Boxeo 2025, con categorías femeninas y participación de equipos de México, Argentina y más. Beltrán evaluó esos certámenes como plataformas clave. “Competiciones así dan visibilidad y experiencia a las boxeadoras”, dijo. Estima que Colombia producirá campeonas mundiales pronto.
Perú muestra un crecimiento sostenido: gimnasios en Lima forman a nuevas generaciones y la Asociación Peruana de Boxeo promueve torneos exclusivos para mujeres. Beltrán celebró las iniciativas. “El boxeo femenino fortalece la disciplina en toda la región”, aseguró. Entrena a peruanas que viajan a México para pulir técnica.
Persisten retos, como las bolsas femeninas son menores y la cobertura mediática resulta limitada. Sin embargo, DAZN ya transmite peleas femeninas. Beltrán consideró positivo el avance tecnológico: “La tecnología lleva el boxeo femenino a millones de hogares”. Visualiza un panorama alentador.
Cuba, tras su reciente oficialización del boxeo femenino, suma atletas con resultados en torneos panamericanos. Beltrán elogió su escuela técnica y puntualizó: “Cuba aporta calidad al boxeo femenino”. Espera que más países del Caribe inviertan en estas atletas.
Laura Serrano, primera latina en el Salón de la Fama del Boxeo, promueve mayor inversión desde México. Beltrán la define como ícono y afirma: “Laura abrió puertas que hoy cruzan muchas jóvenes”. Propone aumentar academias especializadas en la región.
Marcela Acuña, en peso gallo, acumula récords y acerca el boxeo a comunidades rurales mediante gimnasios populares en Argentina. Beltrán resaltó su compromiso social. “Boxeadoras como Acuña cambian vidas”, expresó. Considera que esos liderazgos consolidan el legado femenino.
Familias, gimnasios y entrenadores empujan el cambio. Para Beltrán, el boxeo femenino ya redefine la cultura deportiva latinoamericana. “El boxeo femenino no solo produce campeonas, sino que cambia culturas”, concluyó, al prever más triunfos y reconocimiento global.
%201.png)



















Comentarios